Gianni Vattimo, hoy hablaba de él, publicó hace treinta años
un libro famoso y muy comentado, Il
pensiero debole, que caracteriza el pensamiento de eso que llaman la
postmodernidad…
Artur Mas leo, corto, copio y pego de EL MUNDO: En una visita a un centro de día de
discapacitados intelectuales de Sant Gregori (Girona), Mas ha destacado que "no hay normas ni leyes ni
constituciones ni interpretaciones posibles" para rebatir
sus argumentos, ya que se trata de "un tema de voluntad de la gente y de
derechos, unos derechos que todo el mundo tendría que proteger" (la negrita no es mía). Efectivamente
a esos discapacitados intelectuales hay que protegerlos. Artur Más, empero, no es un discapacitado
intelectual, ni un pensador débil… es un débil mental que no es lo mismo, es un defensor
del pensamiento único, de ese pensamiento unidimensional, cuya formulación es “¿Aquí?
¡Mis güevos treinta y tres la calle abajo… a caballo!!!!” y lo que hay que
hacer es denunciarlo por pirómano mental, por violador intelectual, por
relativista cautivo, por follaconstituciones, por impostor contumaz y mandarle
a los guardias para que lo tengan archivado en el talego y deje de meternos el
dedo por el ojo y se lo meta él donde le quepa…
Hablando de sus conferencias, contaba Camón
Aznar una anécdota de RAMÓN, en Granada en la que dando este un fervorín sobre
olvidé qué, dos tipos malencarados y con notables signos de una intoxicación etílica
sobresaliente –es decir, ¡con una mierda como un catre!-, ante lo disparatado
de lo que Ramón decía, le preguntaba uno a otro: “¿Mato a este tío ya o
esperamos?”. Pues eso se preguntan muchos, ¿a qué coño esperamos para entalegar
a este payo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario