domingo, 3 de junio de 2012

La línea incolora de Dios.


       Cuando se tiene la panza llena y la cartera al punto, la imaginación se puebla de sueños de señorita catequista. Eso justamente es lo que les ha sucedido a los nenes del PSOE, esos que firman en nombre de España un supuesto mensaje a un Dios en el que, la mayoría no cree, en que muchos se ciscan a diario y a casi todos les gustaría ver borrado de la faz de la tierra. Lo siento, lo de dar patadas contra el agujón, es un deporte viejo e inútil, compañeros, ¡de quienes seáis compañeros! (Míos no, caballeretes).
         Lo de escribirle a Dios por medio de un ángel es propio de necios. Dios es el Ser del Universo y no necesita ni móvil ni tiene secretaria que le espacie las visitas en el tiempo. Le podéis hablar directamente y pedirle a Él: no os cortéis, pardillos. Vuestra ignorancia e incredulidad os lleva a pensar que en vez de un Dios que es Amor y que escucha le escribís Homer Simpson, a Blancanitos y los siete enanieves, a Pokemon… ¡vete tú a saber!
  Todo esto, hasta aquí, en la línea progreso-retroceso-risa-ironía-queguayssomos. De ahí al final: un trecho. Lo de que firméis en nombre de todos los españoles, en el nombre de España y talytal me parece regular. A mí me borráis porque no me junto ni con vuestros mayores, ¿me voy a juntar con vosotros?
      Juventudes del PP, juventudes del PSOE, juventudes de CIU… son paradojas que sólo se pueden salvar por elevación. La juventud no puede pertenecer a un partido estatuido salvo que uno sea un trepa, un ansias o un vivo. Hoy por hoy dedicarse a la política es darle salida a la elección de la cuchara con que uno quiere comer. El chaval que con 16 años tiene en la cartera un carné del PSOE –los conozco, los he visto- es un tío que quiere que en su pueblo se le pague el paro y se le discrimine positivamente cuando llegue la hora torera de los eres o de echar unos jornales en el ayuntamiento que su partido pastorea. Un chaval con un carné de la UGT…, otro tanto del lienzo… Lo del PP supongo que será igual…
         Un chaval tiene que irse a indignarse y a rebelarse de verdad. A buscar la verdad a golpe de lecturas, estudio y de puñetazos, de darlos y recibirlos. Un tío joven quiere cambiar la partitocracia en que estamos y no se le ocurre ponerle unas letritas a un angelito blancuzo con olor a norit… Siempre entendí la kale borroka del norte: si no tienen dos dedos de frente, si tienen menos sesos que un mosquito, si su instrucción es nula, si no saben hacer la O con un canuto en la ikastola… ¡pues vamos a pegarle fuego a lo que pillemos por delante! Eso lo entiendo perfectamente, pero lo de las juventudes del PSOE, del PP… y talytal…, ¡me he quedado arrobadito leyendo el hermoso discurso de cuentecillo de navidad para PRIMARIA de los nenetes socialistas que quizá fueron a colegios de monjas! ¿Qué te juegas?
         Insisto. Ellos tienen mucho interés en traspasar una línea incolora. Ellos tienen interés en buscarle las cosquillas a la Iglesia, a los católicos y en tomarse el nombre de Dios en vano. Hay líneas que no se cruzan, ¿por qué –me pregunto- las quiebran y en nombre de qué? ¿De qué se nos quiere distraer? ¿Por qué meter en banderías de partidos a la Iglesia? ¡Ojo, señorita, que aquí siempre toca, si no un pito, una pelota!


No hay comentarios:

Publicar un comentario